Temor ante la posible pérdida del valenciano en zonas castellanohablantes: solo 1 de cada 40 alumnos lo estudia

 


Solo un alumno de cuarenta en segundo de Bachiller de un instituto castellanohablante cursa la asignatura de Valencia: Lengua y Literatura, el resto es exento.

Conselleria y los centros educativos llevan a cabo programas de dinamización lingüística para normalizar el valenciano como lengua vehicular.

La realidad lingüística de la Comunidad Valenciana es dual: valenciano y castellano conviven en el territorio y sus habitantes son igual de valencianos, hablen una lengua u otra. Vemos numerosas campañas para promover el uso del valenciano, lengua maltratada y minorizada históricamente que, poco a poco, "reviscola" cual Tio Canya con el compromiso activo de sus hablantes y de algunas instituciones. Sin embargo, todavía hay retos que afrontar, y es que la conciencia por el uso del valenciano empieza en la educación.

Bien se sabe que, aunque la Comunidad Valenciana sea bilingüe, el peso entre castellano y valenciano no está uniformemente repartido por todo el territorio. Comarcas como l’Alt Millars, l’Alt Palància, la Serranía, el Rincón de Ademuz, Requena-Utiel, la Foia de Bunyol, el Valle de Ayora y la Canal de Navarrés; y algunos municipios de Vinalopó y la Vega Baja del Segura, tienen un predominio castellanohablante, aproximadamente, el 12,7 % de la población valenciana.

¿Y cuál es la situación del valenciano en las aulas de los centros educativos de estos municipios, concretamente, en Bachillerato? A pesar de los proyectos de dinamización lingüística que se llevan a cabo por parte de Conselleria y de los propios centros educativos, destacan casos como el de un instituto de Secundaria de la Canal de Navarrés: de 40 alumnos matriculados en segundo de Bachiller, solo uno cursa la asignatura de Valencia: Lengua y Literatura. En primero de este ciclo, hay 25 alumnos exentos de esta asignatura, de un total de 46, tanto de la modalidad científica y social como de la humanística.

Los alumnos y las alumnas pueden solicitar la exención de la asignatura durante todo el curso y esta tiene que ser aprobada por Conselleria. Si se les da, quedan exentos de la evaluación de la asignatura, aunque en algunos casos permanecen en el aula. Esto a veces puede “impedir el desarrollo normal de la clase”, según fuentes del claustro, ya que implica impartir una materia a una persona en un aula donde hay otras 20 haciendo otras tareas.


EN TITULARES