El "milagro" de Javalambre y Valdelinares
Javalambre y
Valdelinares, las estaciones de esquí de Teruel (y de los valencianos) se han
convertido en una auténtico imposible, un milagro, un oasis para miles de
esquiadores que han encontrado la opción sin tener que desplazarse al Pirineo.
Con unas
precipitaciones de menos de dos centímetros de nieve esta temporada, la cosa
parecía que podía torcerse, pero en Nieve Teruel han hecho magia y cerca de 32
kilómetros de pistas entra ambas estaciones y apertura casi total del dominio
convierten a estas dos estaciones del grupo Aramon en una auténtica delicia.
Durante este
mes, la escuela en la que han aprendido la mayoría de los esquiadores
valencianos está a rebosar. Durante el fin de semana, entre ambas estaciones se
pueden reunir cerca de 5.000 esquiadores cada día. Javalambre cuenta con una
serie de pistas especiales en las que poder disfrutar de la nieve en familia o
con amigos, un Skicross, una zona de habilidad para sentirse un esquiador
olímpico pasando por las puertas de este slalom, que incluye un final realmente
sorprendente y una zona de Freestyle En Valdelinares: hay un espacio ideado
exclusivamente para la práctica del freestyle y sus pistas han sufrido una
transformación espectacular.
Con dos ambientes muy diferenciados, pinar eterno en Valdelinares, montaña mucho más abierta en Javalambre, las dos estaciones más cercanas al Mediterráneo han crecido para convertirse en una opción real para aprender o para pasar un día completo sin repetir pista y disfrutando el deporte del esquí sin tener que conducir durante más de cuatro horas.